Desde que nació Eileen Romero, fue una niña sumamente frágil, no porque se enfermara con frecuencia, sino porque sus huesitos eran prácticamente de cristal. Ella, sufría dolorosas fracturas y la ciencia no le daba buenas noticias. Pero eso, nunc...
Durante muchos años, Ivette Rosado arrastró la convicción de que no era posible confiar en los demás. Las múltiples decepciones que sufrió le daban la razón....